Miro a mis compañeros de trabajo: los funcionarios y no salgo del asombro.
Los funcionarios sólo hablan seriamente del deporte. El Betis, el Sevilla, etc..
Es navidad, y se aferran a esa falsa seguridad que los devuelve a sus casas sin pedir nada a cambio, mientras en Gaza el ejercito israelí diezma a la población palestina con su poderío militar.
Los merkava ya están en las calles de Gaza y el omnipoderoso EE UU ha dado el visto bueno a esta operación de desproporcionada vengaza.
Seguro que más de un palestino a pedido a los reyes un Kalasnikov y no me extraña.
Pero la comunidad internacional obedece a EE UU y tal vez muchos palestinos mueran esta noche inadvertidos porque nadie quiere hablar de otra cosa que no sean deportes.
Esta injusticia internacional conlleva la muerte de mujeres y niños, yo no podré sentirme tranquilo pues me sentiré identificado con ellos. Mañana puede pasarme a mi.
Y me pongo a ver Ocean's eleven, que es muy chic, con todos los chicos guapos copn traje, y las chicas, qué guapas,
ResponderEliminarPero siento en mi alma una pena y una vergüenza profunda.